El libro más increíble que he leído

 No es difícil que un libro me parezca el libro más increíble que he leído porque en mi vida tampoco he leído mucho. Hay veces, obviamente, en las que esta afirmación no se cumple. También hay decepciones o directamente lectura más ligera (que no tienen por qué ser la misma cosa) a la que tampoco hace falta pedirle ni un contenido ni un estilo a la altura de nada. No hace falta que un libro vaya sobre nada (mismamente «Nada», de Carmen Laforet, me pareció grandioso en su día y me abrió la mente sobre ciertos aspectos literarios) para que sea increíble, pero en este caso hablo de uno que sí que va de cosas y del cual estoy disfrutando cada coma. Llevo a lo mejor medio año (o más) leyéndolo porque hace varios años que no leo prácticamente nada, pero me he reconciliado con la lectura y eso basta. Me alegra ser capaz de seguir leyendo, aunque sea a un ritmo tan lento que hasta Plutón tarda menos en dar una vuelta alrededor del Sol. 

Comentarios

Entradas populares de este blog

Todos los días lo mismo

Is the earth colored red?

Escribiendo sobre escribir (una vez más)